Han pasado dos días desde la última conexión. Ayer pusimos a prueba su capacidad de esfuerzo y superación yendo a otro pueblo, a Santurde. Al llegar allí, dieron gracias a sus compañeros por haber sido su compañía y aliento para llegar a Santurde y, como agradecimiento, se han lavado los pies, como Jesús lo hizo con sus discípulos. Tras unos juegos y un buen baño en la piscina, han acabado el día con una gran verbena en el medio del pueblo.
Como reto del día, debían cuidar a un bebé: cambiarle el pañal, echarle crema, darle de comer, ponerle polvos de talco para evitar rozaduras por el calor... y hasta construirle una cuna!
Hoy han vuelto a Santo Domingo muy pronto ya que tenían una labor muy importante: organizar una feria solidaria por el pueblo a favor de Fransol, la ONG con la que las hermanas franciscanas hacen proyectos para ayudar a los más necesitados.
Han acabado agotados y ya duermen. ¿Qué les esperará mañana? ¿Tendrán algún nuevo reto que superar? Podéis seguir todas sus hazañas a través de las redes sociales.
Buenas noches.
El Súper.
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